En octubre el comercio colombiano tuvo un comportamiento menos traumático que en los meses precedentes y las ventas experimentaron una leve mejoría. De acuerdo con nuestra encuesta mensual de opinión comercial, el 29% de los consultados reportó aumento en su volumen de ventas frente al obtenido en igual mes del año anterior, 46% consideró que fueron similares y para el 25% fueron inferiores. El balance (diferencia entre las ”opiniones buenas” y las “opiniones malas”) fue positivo, 4, luego de 24 meses de estar en terreno negativo.
Destacamos una estimulante reanimación del clúster de la moda, conformado en especial por el vestuario y calzado, cuyas ventas a lo largo de los dos últimos años han estado fuertemente golpeadas. El reporte para octubre de los comerciantes de estos sectores fue positivo. A este resultado contribuyeron las ofertas y grandes descuentos por cambio de colección. Una animada venta de disfraces con ocasión del Día de los Niños (Halloween) ayudó a alcanzar estos resultados.
Llama la atención, igualmente, la opinión de los distribuidores mayoristas en el sentido de que aumentaron los pedidos de sus clientes, los detallistas, señal de aprovisionamiento para la temporada de fin de año. Se destacó en octubre el dinamismo del clúster automotor.
En el Valle de Aburrá, según los comerciantes de la región, hubo aumento (por fin) en las ventas de materiales de construcción y artículos para el equipamiento del hogar, lo que podríamos denominar el “Efecto Ikea”. En Cali, gracias al evento Cop16 se registró una dinámica comercial, hotelera, gastronómica y del transporte, que los empresarios de la ciudad calificaron de “impresionante”.
Las expectativas de los comerciantes en el país también mejoraron ligeramente en octubre: el 31% de los consultados creé que la situación general de sus negocios para los próximos seis meses será mejor que ahora, 49% similar y 20% expresa pesimismo. En los departamentos fronterizos hay grandes esperanzas porque la Superfinanciera acaba de autorizar la venta de Soat por días para vehículos extranjeros, adaptando la cobertura a su tiempo de circulación en nuestro territorio. En suma, hay síntomas de que el consumo comienza a levantarse lentamente pero falta un plan de reactivación para acelerar la reactivación de la economía.
PIB creció el 2% en el tercer Trimestre.
En línea con lo anterior el Dane dio a conocer los resultados del PIB en el tercer trimestre creciendo un 2% frente al mismo periodo del año anterior.
Comercio al por mayor y al por menor propiamente tal incluido la reparación de vehículos automotores y motocicletas creció el 3,4%.
Para el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal, “El consumo sigue deprimido, no sólo por las secuelas de la alta inflación, sino también por la falta de confianza de los hogares sobre su situación económica en el corto plazo”.
Dura cuesta para las grandes superficies
Dentro de la Encuesta de comercio al Por Menor, el Dane divulga las ventas y la variación porcentual de los almacenes de gran superficie. Según esta información, las ventas de grandes almacenes e hipermercados en Colombia en el acumulado del año corrido hasta agosto registran un aumento de sólo 3%, lo que en términos reales se traduce en una disminución del orden del 3%.
Más inquietante aún es el hecho de que al corte de agosto, el número de empleos en los almacenes de gran formato fue de 219.261 personas, lo que significó una disminución del 1,7%, frente a igual periodo de 2023.
Las ventas nominales de este grupo de detallistas en el acumulado de los primeros ocho meses del presente año suman 74.3 billones de pesos. Las ventas de los principales almacenes del formato llamado hard discount crecen en el presente año sólo gracias a la apertura de nuevos locales. Si se toman en cuenta únicamente las tiendas con más de un año de operación, las ventas registran un crecimiento cero pero si se le descuentan los efectos de la inflación el balance es negativo. Los fragmentarios registros que se tienen en el presente año del comportamiento del comercio detallista por tipo de formato, arrojan una que otra sorpresa: por ejemplo, las ventas de los supermercados independientes, que entre otras cosas son fuertes en las regiones, se comportan un poco mejor que el promedio del sector.
De acuerdo con el DANE, las ventas de alimentos en los canales modernos en lo corrido de este año hasta agosto, disminuyeron un 0.4% en términos reales. Otro formato que ha tenido un comportamiento más favorable es el denominado coloquialmente como surtifruver, que abunda en los barrios de nuestras ciudades y que por su tamaño no alcanza a incluirse en la muestra que utiliza el DANE para realizar la encuesta de comercio.
Al mismo tiempo, hay indicios de que al canal tradicional, representado en las tiendas de barrio, si bien le ha tocado remar muy duro para enfrentar la coyuntura, continúa manteniendo vigencia y ocupando lugares de vanguardia en la distribución de bienes de consumo masivo en el país con una variación en ventas menos negativa que en el comercio moderno.
Fuente: Bitácora Económica Fenalco.