Hace 10 años, en el municipio de Caldas, Antioquia, nació Milagros, una marca que ha transformado la industria cosmética en Colombia. Lo que comenzó con una inversión de $300.000, una receta casera y una publicación en Facebook, se ha convertido en un caso de éxito empresarial.
En su inicio, Milagros ofrecía tres productos hechos a mano: un aceite para pestañas, un tratamiento capilar y una mascarilla facial. Estos productos, sin etiquetas y comercializados a través de redes sociales, lograron generar ingresos de $1 millón en su primera semana.
Gracias a este impulso inicial, la familia detrás del proyecto pudo cumplir el sueño de comprar una vivienda propia, dejando atrás las limitaciones de un barrio de invasión.
El crecimiento de la empresa fue impulsado por un enfoque en la rentabilidad con impacto social. Al expandirse, se estructuró una red de distribuidoras independientes que, con una inversión mínima, podían acceder al portafolio de Milagros y generar ingresos en sus regiones.
Este modelo no solo permitió una expansión eficiente, sino que también impactó a miles de familias en el país. Según Vanexa Rojas, gerente general de la marca, el proyecto apoya directa e indirectamente a cerca de 5.000 familias.
Hoy, Milagros cuenta con entre 150 y 170 puntos de venta físicos, que incluyen locales y burbujas en centros comerciales, operados por estas distribuidoras. Este modelo tipo franquicia, sin puntos de venta gestionados directamente por la empresa, ha sido clave para su sostenibilidad. En 2023, además, la marca ingresó al catálogo de Novaventa, consolidándose como líder en productos capilares y ampliando su alcance en el mercado nacional.
La profesionalización fue esencial en el camino de Milagros. En sus primeros meses, una visita del Invima les obligó a replantear su operación, lo que los llevó a asociarse con laboratorios especializados. Este paso no solo permitió cumplir con la normativa, sino también elevar la calidad de sus productos. Actualmente, trabajan con algunos de los laboratorios más destacados de América Latina, sin abandonar la esencia colombiana de sus formulaciones.
La innovación es otro pilar fundamental de la marca. Su equipo multidisciplinario trabaja para garantizar que cada producto sea efectivo desde el primer uso, lo que ha consolidado a Milagros como una referencia en resultados dentro del mercado de la belleza.
En términos de proyección, la internacionalización es su siguiente gran meta. La marca está preparada para entrar en Estados Unidos, México, Ecuador y Chile, con estrategias diseñadas para cumplir con las normativas locales y atender las expectativas de los consumidores. Como parte de esta expansión, han integrado a Paulina Vega, ex Miss Universo, como embajadora internacional, confiando en que su reconocimiento abrirá puertas a nuevos mercados.
Con solo 19 referencias, Milagros ha logrado competir con gigantes de la industria que cuentan con cientos de productos. Su enfoque en la calidad, la personalización y la estrategia digital ha sido clave para alcanzar un crecimiento del 54% en lo que va de 2024, superando con creces sus proyecciones iniciales.
La historia de Milagros es un ejemplo inspirador de cómo una idea simple puede convertirse en un fenómeno empresarial que combina rentabilidad y responsabilidad social, transformando vidas y liderando una industria en constante evolución.
De acuerdo con el Mapa Nacional del Retail, realizado por Mall & Retail, Milagros ocupo el 7º lugar en la categoría de Belleza y Cosmética, con unos ingresos de $ 92.000 millones y un crecimiento del 18% y con unas utilidades de $ 29.346 millones.
Fuente: Mall & Retail.
